Por ActionCOACH Rodrigo Escobedo
Una de las grandes incógnitas que se viven en las empresas familiares es el retiro del fundador ¿qué hará una vez que se retire? Por un lado, el fundador tiene miedo a “jubilarse” porque su empresa ha sido parte de su estilo de vida por los últimos 30-40 años y no concibe su vida fuera de la empresa que él creó. Por otro lado, los hijos ven que su padre ya está cansado, que sus ideas están quedado obsoletas, pero temen que al jubilarse el fundador se pueda enfermar, o en el peor de los casos morir, al perderle sentido a la vida ante un futuro incierto.
Existen 4 formas en las cuales el fundador de una empresa familiar se puede retirar. Dos de ellas son positivas, las otras dos no tanto y son las siguientes:
1. El Embajador: En este esquema el fundador ya se salió de la operación de la empresa que él creo y está enfocado en buscas alianzas comerciales en otras regiones, en ser patrocinador para deportistas y estar presente en esos eventos o en hacer labores altruistas siendo un orgulloso representante de la marca que creó, pero sin el desgaste de estar en el día a día del negocio.
2. El Gobernador: La sucesión debe de ser un proceso, más que un evento. Y la sucesión se debe de dar por planeación, no por defunción. El fundador que se retira de esta manera define, junto con la familia, un plazo determinado para dejar el liderazgo de la empresa.
Como los Gobernadores, que saben que su periodo dura 6 años y después deberán de dejar el puesto. Una sucesión correctamente llevada debe de alinearse a este modelo, porque así el sucesor estará listo y el fundador estará convencido que su período de liderazgo terminó, que puede seguir vinculado a la empresa que creó, pero de una manera diferente.
3. El Rey: ¿Cómo salían los reyes de su castillo? Con los pies por delante. En esta forma de retirarse, el fundador se rehúsa a dejar el liderazgo de la empresa que fundó, a pesar de que sus decisiones ya no sean las más acertadas, ni sus formas las más correctas. Es ese dueño que trabajará hasta sus últimos días, pero que sus últimos años es más el daño que la aportación que estará haciendo a su empresa, además de debilitar los vínculos con la familia, provocando que tanto familia como colaboradores abandonen la empresa.
4. El General: En muchos casos a lo largo de la historia, un dictador derrotado sólo estaba esperando el momento perfecto en el que sucesor falle para buscar retomar el poder. Este modelo puede ser muy desgastante para todos en la familia, y para los colaboradores en la empresa, porque no hay claridad de quién es el líder, la gente no sabe a quién hacerle caso, y las decisiones del “General” que retomó el poder, no necesariamente ayudarán a que la empresa mejore.
Más allá de los 4 modelos arriba mencionados, es clave que la familia se alinee respecto al rol del fundador. Puede seguir siendo empleado, tal vez trabajando a medio tiempo y dedicándose a lo que más le gusta, pero sin el estrés y desgaste de estar a la cabeza de la empresa.
Si formas parte de una empresa familiar y quieres tener claridad respecto a cómo lograr una sucesión de la primera a la segunda generación de manera exitosa platica con nosotros para apoyarte a que empresa no sólo crezca y funcione de manera eficiente, sino que se logre esto manteniendo la armonía y sana convivencia de la familia, porque nuestra motivación es que pasen de ser una empresa familia a una FAMILIA EMPRESARIA.
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